Osman I (1258-1326)
Area del Imperio Otomano durante el reinado de Osmán I
Osman I (1258-1326) (en turco, Sultan Osman Gazi; Osmán es una deformación del árabe: عُثمَان `uθmān, `Uthman; en turco: gazi, 'triunfador, combatiente de la fe') fue el líder de los Osmanlíes u Otomanos, la dinastía que estableció y gobernó el Imperio otomano. Era hijo de Ertuğrul y le sucedió en 1281. Osman aprovechó la debilidad de los imperios selyúcida y bizantino para establecer y fortalecer su emirato.
Su padre, Ertoğrül, llevó a su tribu (Kayi) del Asia Central hasta Anatolia, huyendo de la persecución de los mongoles. Con el auspicio de los selyúcidas de Rüm fundó un pueblo conocido como Söğüt, en el área noroccidental de la antigua Frigia. El lugar resultó ser muy favorable, pues en Occidente, el poderoso Imperio bizantino experimentaba graves problemas políticos, mientras que las fuerzas musulmanas en Oriente se fragmentaban ante la agresión de los mongoles: en 1258 Bagdad fue saqueada por Hulagu, primer Il-Jan mongol de Irán. En 1281 Osmán fue declarado Bey de la ciudad de Söğüt por su padre, y lo sucedió a su muerte en la jefatura de la tribu. En 1290 se proclamó autónomo de los turcos selyúcidas, de quienes era vasallo, y tomó el título de Bey. Hasta 1300 se dedicó a atacar a sus vecinos y capturar sus fortalezas. Ayudado por guerreros musulmanes, en su mayoría turcomanos (desarraigados de sus tierras de pastoreo por los mongoles y atraídos por el botín resultante de las incursiones a territorio bizantino), extendió su Estado hacia el noroccidente de Asia Menor, a expensas de los señoríos cristianos y de los principados turcomanos vecinos.
Después de la conquista del castillo de Bilecik (1299), el Sultán selyúcida de Rüm, Kaikubad III, le remite un estandarte y un tambor en reconocimiento. Comienza a ser conocido como Kara Osman Bey (kara: negro, en turco). En el territorio (aún exiguo) que controla, las plegarias de los viernes se dicen en su nombre. A partir de 1299 acuña moneda, nombra visir a su hijo Ala al-Din Ali e impone un impuesto de capitación (impuesto personal), contrario a la ortodoxia musulmana. Para la recaudación de este impuesto, hace acuñar una moneda de plata llamada akçe, a imitación de las que acuñaban los emperadores griegos de Trebizonda.
Pero el verdadero nacimiento del Imperio puede atribuirse a la conquista de la ciudad de Eskişehir (en turco 'Ciudad Vieja') en 1301–1303. En 1302 derrotó a los bizantinos del emperador Andrónico II Paleólogo en la batalla de Bafea. Después de la batalla, los turcos capturaron una serie de pequeños fuertes. Con la caída del último de estos fuertes bizantinos, Yenişehir ('Ciudad Nueva'), los turcos quedaron en posición de poner sitio a las grandes ciudades bizantinas de Bitinia: Nicomedia (hoy Izmit), Prusa (hoy Bursa) y Nicea (hoy İznik), devastando todo el territorio que se encontraba alrededor de dichas ciudades.
La consecuente y rápida toma de estas ciudades se vio impedida, por el momento, por la falta de fuerzas y de equipos de asedio que adolecían los turcos. Como consecuencia de esta devastación, miles de refugiados marcharon hacia Constantinopla, en el Oeste. En esta época, los bizantinos, al parecer, reconocieron a los otomanos como sus más peligrosos vecinos en Anatolia, como testifican los esfuerzos del emperador Andrónico II para provocar al Ilkanato un ataque directo contra ellos. Finalmente llego a un acuerdo con el il-kan Öljeitü, quien envió un ejército a Bitinia en 1307. Este ejército mongol consiguió escasos resultados, salvo el de espolear aún mas a Osmán, y tras la partida de la Compañía Catalana no hubo resistencia organizada de los bizantinos frente a los otomanos, ni frente a los otros emiratos turcomanos ghazidel sur.
Al fracasar el Ilkanato en su intento de establecer un control sobre el sector occidental del antiguo Sultanato Selyúcida de Rüm, los otomanos quedaron libres para avanzar a expensas de los bizantinos, mientras que los emiratos turcomanos mas orientales se vieron obligados a suministrar a sus amos mongoles de Persia hombres y dinero como tributo. En 1317 cedió el mando del ejército a su hijo Orhan asegurando de este modo la sucesión. En 1326, cayeron las ciudades de Prusa y Nicea ante las fuerzas de Orhan. Prusa, rebautizada por los turcos Bursa, fue la nueva capital del imperio tras su caída y la subsiguiente entrada a ella de Osman, después de ocho años de asedio hacia esta ciudad.
Osman I murió al poco tiempo, el 1 de agosto de 1326, en Bursa de una crisis de gota. A su muerte, el Imperio tenía una extensión de 16.000km². Sus sucesores le dieron el título póstumo de Gazi; cuando un nuevo Sultán ascendía, el pueblo clamaba: "Que sea tan grande como Osmán".
La administración del incipiente estado otomano
En el momento de la asunción de Osmán al poder, el estado otomano constituía un principado (beylicato o emirato) fronterizo (uc beylik) más que un Estado propiamente dicho. Las funciones regulares de gobierno eran desempeñado por las tribus y clanes de acuerdo con sus tradiciones y maneras propias. La única cosa que vino a diferenciar a Osmán de los otros caudillos Gazi turcomanos fueron sus singulares hazañas militares lo cual llevó a su señor selyúcida a reconocerle formalmente como bey, o señor capacitado para ejercitar una efectiva autoridad política en un área definida, en ese momento la marca noroeste de la Anatolia selyúcida. Como uc bey e incluso como bey, tanto Osmán como su hijo y sucesor, Orhan, eran poco más que un jefe tribal. El gobierno administrativo y militar era compartido con los jefes de clan turcomanos que rodeaban al bey, que en la paz recaudaba los impuestos y en la guerra luchaba contra el enemigo. Como jefe tribal el bey tenía derecho a la lealtad y obediencia de sus seguidores solo en relación a sus funciones militares y siempre y cuando les llevara a la victoria. Aparte de esto no era más que uno más entre iguales en los consejos tribales que decidían la política interna.
En esta situación, los beys otomanos eran accesibles no solo a los jefes de clan, sino también a sus seguidores. Los beys podían intervenir en disputas que tuvieran lugar entre clanes y en el interior de ellos, pero su jurisdicción en realidad era muy limitada.
La sharia (ley islamica) y sus juristas tenían muy poca influencia y la costumbre y la ley tribal túrquicas prevalecían. La administración se manejaba en términos económicos. Cada clan aceptaba la jefatura militar otomana solo por las ventajas economicas que tal asociación podía traer. Cada clan reunía todo el botín que podía tomar en las tierras conquistadas como parte del Ejército otomano; y como continuación de la conquista tenía el derecho a recaudar impuesto en el mismo territorio con toda regularidad. La única ventaja que tenia el bey otomano era, como jefe tribal de guerra, el derecho de quedarse con una quinta parte del botín (pençik) a cambio de su servicio como líder. La única razón por la cual la fortuna del bey se hacia mayor que la de los otros jefes de clan que le seguían, era porque, a parte del pençik que recaudaba, también le correspondía el botín que obtenía de sus acciones militares. En una situación en la que el bey dependía completamente del reconocimiento de sus seguidores, y en el cual su fortuna era poco mayor que la de ellos, no tenía medios para desempeñar más que los limitados poderes a los cuales su posición como jefe militar y el consejo de jefes de clan (divan) le daban derecho.
Referencias
Predecesor: Ertugrul Bey otomano 1281-1326 Sucesor: Orhan I
Osman I (1258-1326) (en turco, Sultan Osman Gazi; Osmán es una deformación del árabe: عُثمَان `uθmān, `Uthman; en turco: gazi, 'triunfador, combatiente de la fe') fue el líder de los Osmanlíes u Otomanos, la dinastía que estableció y gobernó el Imperio otomano. Era hijo de Ertuğrul y le sucedió en 1281. Osman aprovechó la debilidad de los imperios selyúcida y bizantino para establecer y fortalecer su emirato.
Su padre, Ertoğrül, llevó a su tribu (Kayi) del Asia Central hasta Anatolia, huyendo de la persecución de los mongoles. Con el auspicio de los selyúcidas de Rüm fundó un pueblo conocido como Söğüt, en el área noroccidental de la antigua Frigia. El lugar resultó ser muy favorable, pues en Occidente, el poderoso Imperio bizantino experimentaba graves problemas políticos, mientras que las fuerzas musulmanas en Oriente se fragmentaban ante la agresión de los mongoles: en 1258 Bagdad fue saqueada por Hulagu, primer Il-Jan mongol de Irán. En 1281 Osmán fue declarado Bey de la ciudad de Söğüt por su padre, y lo sucedió a su muerte en la jefatura de la tribu. En 1290 se proclamó autónomo de los turcos selyúcidas, de quienes era vasallo, y tomó el título de Bey. Hasta 1300 se dedicó a atacar a sus vecinos y capturar sus fortalezas. Ayudado por guerreros musulmanes, en su mayoría turcomanos (desarraigados de sus tierras de pastoreo por los mongoles y atraídos por el botín resultante de las incursiones a territorio bizantino), extendió su Estado hacia el noroccidente de Asia Menor, a expensas de los señoríos cristianos y de los principados turcomanos vecinos.
Después de la conquista del castillo de Bilecik (1299), el Sultán selyúcida de Rüm, Kaikubad III, le remite un estandarte y un tambor en reconocimiento. Comienza a ser conocido como Kara Osman Bey (kara: negro, en turco). En el territorio (aún exiguo) que controla, las plegarias de los viernes se dicen en su nombre. A partir de 1299 acuña moneda, nombra visir a su hijo Ala al-Din Ali e impone un impuesto de capitación (impuesto personal), contrario a la ortodoxia musulmana. Para la recaudación de este impuesto, hace acuñar una moneda de plata llamada akçe, a imitación de las que acuñaban los emperadores griegos de Trebizonda.
Pero el verdadero nacimiento del Imperio puede atribuirse a la conquista de la ciudad de Eskişehir (en turco 'Ciudad Vieja') en 1301–1303. En 1302 derrotó a los bizantinos del emperador Andrónico II Paleólogo en la batalla de Bafea. Después de la batalla, los turcos capturaron una serie de pequeños fuertes. Con la caída del último de estos fuertes bizantinos, Yenişehir ('Ciudad Nueva'), los turcos quedaron en posición de poner sitio a las grandes ciudades bizantinas de Bitinia: Nicomedia (hoy Izmit), Prusa (hoy Bursa) y Nicea (hoy İznik), devastando todo el territorio que se encontraba alrededor de dichas ciudades.
La consecuente y rápida toma de estas ciudades se vio impedida, por el momento, por la falta de fuerzas y de equipos de asedio que adolecían los turcos. Como consecuencia de esta devastación, miles de refugiados marcharon hacia Constantinopla, en el Oeste. En esta época, los bizantinos, al parecer, reconocieron a los otomanos como sus más peligrosos vecinos en Anatolia, como testifican los esfuerzos del emperador Andrónico II para provocar al Ilkanato un ataque directo contra ellos. Finalmente llego a un acuerdo con el il-kan Öljeitü, quien envió un ejército a Bitinia en 1307. Este ejército mongol consiguió escasos resultados, salvo el de espolear aún mas a Osmán, y tras la partida de la Compañía Catalana no hubo resistencia organizada de los bizantinos frente a los otomanos, ni frente a los otros emiratos turcomanos ghazidel sur.
Al fracasar el Ilkanato en su intento de establecer un control sobre el sector occidental del antiguo Sultanato Selyúcida de Rüm, los otomanos quedaron libres para avanzar a expensas de los bizantinos, mientras que los emiratos turcomanos mas orientales se vieron obligados a suministrar a sus amos mongoles de Persia hombres y dinero como tributo. En 1317 cedió el mando del ejército a su hijo Orhan asegurando de este modo la sucesión. En 1326, cayeron las ciudades de Prusa y Nicea ante las fuerzas de Orhan. Prusa, rebautizada por los turcos Bursa, fue la nueva capital del imperio tras su caída y la subsiguiente entrada a ella de Osman, después de ocho años de asedio hacia esta ciudad.
Osman I murió al poco tiempo, el 1 de agosto de 1326, en Bursa de una crisis de gota. A su muerte, el Imperio tenía una extensión de 16.000km². Sus sucesores le dieron el título póstumo de Gazi; cuando un nuevo Sultán ascendía, el pueblo clamaba: "Que sea tan grande como Osmán".
La administración del incipiente estado otomano
En el momento de la asunción de Osmán al poder, el estado otomano constituía un principado (beylicato o emirato) fronterizo (uc beylik) más que un Estado propiamente dicho. Las funciones regulares de gobierno eran desempeñado por las tribus y clanes de acuerdo con sus tradiciones y maneras propias. La única cosa que vino a diferenciar a Osmán de los otros caudillos Gazi turcomanos fueron sus singulares hazañas militares lo cual llevó a su señor selyúcida a reconocerle formalmente como bey, o señor capacitado para ejercitar una efectiva autoridad política en un área definida, en ese momento la marca noroeste de la Anatolia selyúcida. Como uc bey e incluso como bey, tanto Osmán como su hijo y sucesor, Orhan, eran poco más que un jefe tribal. El gobierno administrativo y militar era compartido con los jefes de clan turcomanos que rodeaban al bey, que en la paz recaudaba los impuestos y en la guerra luchaba contra el enemigo. Como jefe tribal el bey tenía derecho a la lealtad y obediencia de sus seguidores solo en relación a sus funciones militares y siempre y cuando les llevara a la victoria. Aparte de esto no era más que uno más entre iguales en los consejos tribales que decidían la política interna.
En esta situación, los beys otomanos eran accesibles no solo a los jefes de clan, sino también a sus seguidores. Los beys podían intervenir en disputas que tuvieran lugar entre clanes y en el interior de ellos, pero su jurisdicción en realidad era muy limitada.
La sharia (ley islamica) y sus juristas tenían muy poca influencia y la costumbre y la ley tribal túrquicas prevalecían. La administración se manejaba en términos económicos. Cada clan aceptaba la jefatura militar otomana solo por las ventajas economicas que tal asociación podía traer. Cada clan reunía todo el botín que podía tomar en las tierras conquistadas como parte del Ejército otomano; y como continuación de la conquista tenía el derecho a recaudar impuesto en el mismo territorio con toda regularidad. La única ventaja que tenia el bey otomano era, como jefe tribal de guerra, el derecho de quedarse con una quinta parte del botín (pençik) a cambio de su servicio como líder. La única razón por la cual la fortuna del bey se hacia mayor que la de los otros jefes de clan que le seguían, era porque, a parte del pençik que recaudaba, también le correspondía el botín que obtenía de sus acciones militares. En una situación en la que el bey dependía completamente del reconocimiento de sus seguidores, y en el cual su fortuna era poco mayor que la de ellos, no tenía medios para desempeñar más que los limitados poderes a los cuales su posición como jefe militar y el consejo de jefes de clan (divan) le daban derecho.
Referencias
Predecesor: Ertugrul Bey otomano 1281-1326 Sucesor: Orhan I