Trastámaras
Dinastía de origen castellano que reinó en Aragón desde 1412 tras la elección en el Compromiso de Caspe del infante don Fernando de Antequera, perteneciente a dicha casa, para ocupar el trono con el nombre de Fernando I A don Fernando le sucedieron en el regimiento de Aragón sus hijos Alfonso V y Juan II, y finalmente su nieto Fernando II el Católico, hasta 1516 en que comenzaron a reinar los Austrias
Los trastámaras que se instalaron en el reino aragonés y en la Corona no dejaron de lado sus intereses castellanos y se caracterizaron por la política matrimonial tendente a unificar todos los territorios españoles bajo la misma familia. De espíritu fuerte y autoritario, los Trastámaras aragoneses reanudaron las empresas mediterráneas que tantos triunfos y gloria habían proporcionado a la Corona de Aragón y no abandonaron nunca sus inquietudes culturales, especialmente Alfonso V, quien permaneció gran parte de su reinado en Nápoles atraído por el esplendor cultural de aquella corte.
No obstante, los trastámaras tuvieron que enfrentarse a las aspiraciones de los nuevos grupos de presión que en el siglo XV pretendían ganar o recuperar prestigio y peso politico, social y económico, siendo de destacar los enfrentamientos entre la nobleza y la monarquía, la insistencia de las Cortes aragonesas para controlar las actuaciones reales y la agitación urbana de las oligarquías dominantes que obligó a Fernando I y a Alfonso V a disponer algunas reformas de los gobiernos municipales para evitar el descontrol de las ciudades y procurar atraer a sus intereses a las autoridades municipales.
El espíritu absolutista y dominador de los trastámaras que reinaron en Aragón se recoge sobre todo en las figuras de Juan II y Fernando el Católico, que culminaron el proceso iniciado en Castilla en 1368 y que se conoce como la «revolución trastámara en la Península».
